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lunes, 18 de mayo de 2015

MONARQUÍA ASTURIANA

Afianzamiento y expansión.
Tras la abdicación de Bermudo I, Alfonso II el Casto volvió a Asturias y se proclama rey, acabándose el período de relativa paz con los musulmanes de periodos anteriores. Durante su reinado realiza expediciones de castigo hacia el sur, llegando tan lejos como hasta Lisboa en 798, y en 825 vence también a los musulmanes en el Nalón. Fija la capital del reino en Oviedo y repuebla Galicia y zonas septentrionales de Castilla y León. Fue un reinado expuesto a ataques continuos de los musulmanes. Aun así, se expande, y aparece el prerrománico asturiano, dando lugar a joyas de la arquitectura medieval europea. Alfonso II instaura el culto jacobeo, y es la primera figura en el Camino de Santiago, que vincula a Asturias con Europa (especialmente con el reino de Carlomagno), teniendo como enemigo común a un Sur de cultura oriental. Alfonso II era de madre alavesa, con lo que ya se ve la vocación de atraer al reino asturiano a los vecinos vascones. En la batalla de Lutos (llodos en asturiano, ciénagas en castellano), se inflige una dura derrota a los árabes y bereberes que querían acabar con la creciente amenaza que suponía el ya reino. En 808, manda forjar la Cruz de los Ángeles. Este rey encarga al arquitecto Tioda la construcciones de varios edificios de carácter regio y religioso para embellecer Oviedo, de los cuales por desgracia pocos han sobrevivido, al edificarse encima en reinados posteriores.
Los siguientes reyes, Ramiro I (hijo de Bermudo que se proclama rey tras una guerra civil) y Ordoño I, viven en un periodo de guerra continua contra los musulmanes. En tiempos de Ramiro I, se desarrolla el arte ramirense, el apogeo del prerrománico asturiano. Este rey libra la batalla de Clavijo, en la que, según la leyenda, el apóstol Santiago a lomos de un caballo blanco ayuda al ejército asturiano contra las tropas islámicas. En el año 844, una flota normanda aparecía frente a la costa de Gijón. No se sabe con certeza si desembarcaron allí, pero no fueron detenidos ya que prosiguieron hasta el lugar que las crónicas llamaban Faro de Brigantio (La Coruña), donde fueron rechazados, prosiguiendo la incursión según las crónicas hacia España (las crónicas asturianas llamaban España a al-Ándalus).
Ordoño repuebla Astorga, León, Tuy y Amaya. Establece relaciones estrechas con el reino de Navarra, ayudando posiblemente a la liberación del rey García Íñiguez secuestrado por los normandos. Dentro del proceso de vinculación con el valle del Ebro, establece alianzas con los Banu Qasi de Zaragoza, a los que también combate en ocasiones en sucesivas variaciones de alianzas. Ordoño también trata de ayudar, sin éxito, a los mozárabes toledanos en rebelión contra el emir cordobés. A su muerte, le sucede su hijo Alfonso III.
Monarquía asturiana.
En el momento en que los musulmanes ganaron, en la batalla de Guadalete, al reino visigodo de Toledo, los cristianos de Toledo huyen para buscar refugio en Asturias. Es en este momento cuando las reliquias que hoy se guardan en la Cámara Santa de la Catedral llegan a Asturias. Primero se guardaron en el Monsacro, (Montes de Morcín) y luego en Oviedo. Esta región nunca sufrió una intensa arabización ya que las ocupaciones por parte de los musulmanes eran eventuales y tenían más un carácter de razzias.
En el año 718 en Asturias se produce una primera revuelta contra el poder musulmán, al mando de un caudillo, (probablemente noble) llamado Don Pelayo. Esta revuelta fue controlada y Pelayo detenido y encarcelado.
Don Pelayo consigue huir, y en 722, tiene lugar un segundo enfrentamiento en la Batalla de Covadonga contra el general árabe Munuza. Ésta fue más una victoria guerrillera que militar. Don Pelayo con intención de consolidar su triunfo se proclama rey en Cangas de Onís fundando el Reino de Asturias.
La monarquía asturiana, a base de varias escisiones y reagrupaciones daría paso en los siglos siguientes a los Reinos de León, de Galicia, de Castilla y de Portugal. A partir de ese momento y hasta 1492 la Península Ibérica estará dividida en una parte musulmana y otra cristiana.
Resultado de imagen de expansion del reino de asturiasCon Fruela la capitalidad pasó a Oviedo. Allí, el abad Máximo y su sobrino Fromestano habían construido un cenobio benedictino sobres las ruinas de un castro romano. Castro que, en tiempos de Augusto, protegía la cercana ciudad de Lucus Asturum (probablemente en la zona de Lugones) y se situaba en lo alto de la colina Obetao. Alfonso II el Casto amuralla la ciudad, construye la primitiva basílica de San Salvador y la basílica de San Julián de los Prados.
Durante el siglo IX entre los reinados de Ramiro I y Alfonso III el Magno se construyen: San Miguel de Lillo, Santa María del Naranco, la iglesia de San Salvador de Valdediós y Santa Cristina de Lena.
El Reino de Asturias se fracciona tras la muerte del rey Alfonso III el Magno, quien reparte sus dominios entre tres de sus cinco hijos. Estos dominios incluían, además de Asturias, el condado de León, el de Castilla, el de Álava, el de Galicia y el de Portugal (que entonces era solo la frontera sur de Galicia). García se quedó los dos primeros condados fundando el Reino de León. Ordoño II se quedó Galicia y Portugal, y Fruela II se quedó Asturias y heredó, más tarde, el reino de León de su hermano García I que no tuvo descendencia.
Apogeo y final.
Alfonso III marca el momento cumbre de poderío del reino de Asturias. Establece relaciones muy estrechas con el Reino de Navarra, lucha y se alía repetidas veces con los Banu Qasi de Zaragoza y lucha al lado de los mozárabes de Toledo en su lucha contra el poder emiral.
En el año 908, un siglo después de que Alfonso II lo hiciera con la cruz de los Ángeles, manda forjar la Cruz de la Victoria, símbolo desde entonces de Asturias. Alfonso se casa con Jimena, noble navarra, posiblemente hija de García Iñíguez. Con el apoyo de los nobles gallegos, como Hermenegildo Gutiérrez, conquista el norte del actual Portugal. También se avanza por el Duero, conquistándose Zamora y Burgos. En el momento de apogeo, el reino asturiano ocupa todo el noroeste peninsular, desde Oporto hasta Álava.
García I, hijo de Alfonso III el Magno, después de su lucha contra su padre y sus hermanos Ordoño II y Fruela II, traslada la capital del reino a León, con lo que se crea un nuevo reino que aglutinará.

Citas Célebres:
“Nadie se nos montará encima si no doblamos la espalda.”
“La paciencia es la más heroica de las virtudes, precisamente porque carece de toda apariencia de heroísmo.”
“Por muy lejos que el espíritu vaya, nunca irá más lejos que el corazón.”
“¿Quieres ser rico? Pues no te afanes en aumentar tus bienes, sino en disminuir tu codicia.”
“Un momento puede hacernos infelices para siempre.”
“Nadie predica mejor que la hormiga, y no habla.” 
"Con cada vez que te veo nueva admiración me das, y cuando te miro más aún más mirarte deseo."
“Me he arrepentido muchas veces de haber hablado; jamás de haber callado.”.
“Yo amo, tu amas, el ama, nosotros amamos, vosotros amáis, ellos aman. Ojalá no fuese conjugación sino realidad.”
“El hombre emplea la hipocresía para engañarse a sí mismo, acaso más que para engañar a otros.”
“La mejor alegría es la alegría de dar vida a tu ser.”
“El dinero es como un sexto sentido: sin él no podríamos desarrollar los otros cinco.”
“La vida está llena de alegrías el harte consiste en saber distinguirlas.”
“¡Ay, cuántas grandes cosas se derrumban por motivos insignificantes!.”

“El progreso no es un accidente, es una necesidad, una parte de la naturaleza.” 

OTRAS POCAS MAS DE ROSAS